miércoles, abril 23, 2008

¿PORQUÉ ESCRIBIMOS POESÍA?

El solemne está entregado totalmente con el baile de las hadas, el señor de barba liberando las fuerzas de autodestrucción de la alternativa al solemne y Solbes empezando a decir la verdad (me temo que todavía nos espera lo peor). Con esta situación es muy difícil pensar en el necesario proyecto de destino común para la Nación Española, que nos una en la persecución de unos fines elevados de bienestar económico y de sociedad madura, esforzada y virtuosa. Por lo que es razonable tratar de pensar en cosas más elevadas, como la poesía.

Hace tiempo hice una pregunta a la autora del blog,
“El Paraíso de Eva”, sobre ¿porqué escribimos poesía?, ¿cuáles son las razones básicas que hacen que el hombre glose sus sentimientos y afanes de esta forma de expresión?. Lo responde en este interesante “post”,.

Es un tema realmente atractivo, ¿porqué escribimos poesía?, ¿cuáles son las razones básicas que hacen que el hombre glose sus sentimientos y afanes de esta forma de expresión?. Pero debe ser tratado en
el blog adecuado, Este mi humilde blog, trata de otros temas (es un barco del Rey, no un yate de recreo).

miércoles, abril 16, 2008

TITO LABIENO Y FARSALIA

Va a ser una batalla de caballería, le comentó Tito Labieno a Cneo Pompeyo “Magnus”, antes de iniciar la batalla de Farsalia, confiado en que su superioridad numérica inclinaría el veredicto de Marte de su lado. Efectivamente, fue una batalla de caballería, pero el maestro, César, superó al alumno, Labieno y a Pompeyo.

César lanzó su caballería, jinetes germanos ubios fundamentalmente, en un terreno estrecho, lo que anulaba en parte la ventaja de su oponente. Al ser superado en número se retiró y Labieno le persiguió con toda su caballería. Pero César había apostado infantería oculta en las cercanías. La infantería bien organizada y formada, con voluntad de aguantar a pie firme, es muy difícil de superar por la caballería. Ney y Napoleón lo sufrieron en Waterloo ante los cuadros formados de la infantería británica comandada por Wellington. El ataque de caballería, cuando se enfrenta a infantería formada, siempre debe ir acompañada de la infantería. En Adrianápolis, también los romanos frente a los godos, cometieron ese error.

El resultado es conocido, César derrotó a Pompeyo y a su antiguo segundo de la guerra de las Galias. Labieno fue su mejor legado en las Galias, era un hombre terrible, de una gran ferocidad y violencia. Excelente militar, pero de una excesiva crueldad que incluso César llegó a censurar. Las tribus belgas fueron masacradas por el terrible Labieno. Permaneciendo al lado de César, Labieno nunca podría brillar a la altura que él consideraba acorde a su valía, siempre sería su segundo. Por lo que optó por unirse a Pompeyo en busca de mejor suerte. Cuando el segundo piensa que es mejor que el primero, debe estar muy seguro que su capacidad supera la del primero, ("nosce te ipsum)" y que Fortuna le sonreirá. En Farsalia, Labieno constató que César le superaba, su derrota y posterior muerte en la batalla de Munda, fue el precio de su error.

jueves, abril 10, 2008

"NOSCE TE IPSUM"

Cuando Ben Gurion ofreció a A. Einstein ser presidente de Israel, éste declinó su ofrecimiento y le contestó lo siguiente: “Estoy profundamente conmovido por la oferta de nuestro Estado de Israel, y al mismo tiempo apesadumbrado y avergonzado de no poder aceptarla. Toda mi vida he tratado con asuntos objetivos; por consiguiente, carezco tanto de aptitud natural como de experiencia para tratar propiamente con personas y para desempeñar funciones oficiales.”.

El profesor del IESE S. Álvarez de Mon, exponía en el diario Expansión de ayer, lo importante que es ser consciente de las propias limitaciones y que la aptitud para determinadas funciones, no implica el éxito en otras. Este hecho tan evidente, pasa por un conocimiento de uno mismo cabal, el “conócete a ti mismo” del templo de Delfos, “gnosti te autvn (nosce te ipsum)”. El profesor Álvarez trataba del mundo de la empresa fundamentalmente, pero su razonamiento es perfectamente aplicable al ámbito de la política.

Estos días en el PP están sumidos en un debate interno importante. La palabra debate, es quizá benigna para los acontecimientos, pero pensemos en positivo y que esta catarsis tenga unos resultados saludables para el partido de la oposición, y por ende para la vida política española en general.

Sin entrar a valorar las opciones, lo que parece más claro es que el Sr. Rajoy es una parte muy importante del problema, en sus causas básicas, por lo que no puede ser solución al mismo. Ha tenido su oportunidad y ha fallado. Puede ser correcto dejar un período de transición para evitar que el debate se convierta en una lucha cainita destructora (más aún), pero una vez estabilizada la situación debe dejar paso a otro tipo de propuestas. D. Mariano es un hombre lleno de excelentes virtudes, pero nunca ganará unas elecciones, me parece un buen gestor, un buen político, un buen parlamentario,....., pero es un muy mediocre candidato.

Al igual que Einstein, un conocimiento de las limitaciones propias lleva a tomar decisiones acertadas. No es válido arrogarse en el servicio al bien común, para mantener una situación perdedora en su origen. No sé si en otro tipo de sociedad Rajoy ganaría a Zapatero, pero en la España actual, no. Parafraseando a Cicerón, “pensamos en la República de Platón, y vivimos en el fango de Rómulo”.

D. Mariano, nosce te ipsum.

miércoles, abril 02, 2008

EL SEGUNDO

En toda organización es muy importante la distribución de la responsabilidad, el poder de decisión. Incluso los dictadores más dictadores, los autoritarios más autoritarios,....deben tener uno o varios segundos que les ayuden en su toma de decisiones, y en la ejecución de las mismas. Quién se elige como segundo y/o en quien se confía, es una señal muy clara de las intenciones, estilo y modo de actuación del máximo responsable de la organización, del uno.

La relación entre el uno y el dos, es muy interesante. Cuando el sol del uno brilla , oscurece al resto de los cuerpos celestes. Mientras esto es así el uno no debe temer en exceso al dos, pero cuando el sol del uno empieza a oscurecer es cuando se inicia el brillo de las otras estrellas.

Es vital para el uno saber en quien confiar y en quien sólamente encargar tareas. El Sr. Rajoy, como es gallego y hombre ya curtido en la dinámica partidista, tendrá muy presente todo esto en los próximos tiempos, que van a ser muy interesantes.

Como de la clase política tengo un concepto muy mejorable, no son un modelo de areté, me gusta ver esta relación de la que tratamos desde otro prisma y en otros entornos. En la Historia hay muchos ejemplos, a mí me gusta mucho la de César con Tito Labieno. Labieno era una profeta de la destrucción, parafraseando al oscarizado McCarthy, el legado más eficaz de César en la Guerra de las Galias. Le encargó misiones, pero no confió en él. Otro día hablamos de Labieno y Farsalia.

Por supuesto, en la epopeya napoleónica hay infinidad de ejemplos de la relación del gran corso con sus segundos. En lo político y militar. La relación con Berthier, su jefe de estado mayor, queda muy bien reflejada en la magnífica novela
“La batalla” de P. Rambaud.

Tiene D. Mariano materia de reflexión.