viernes, septiembre 19, 2008

DÍAZ FERRÁN Y GABILONDO. EJEMPLOS DE HOY

Hay semanas que en las que se superan las expectativas más exageradas sobre el absurdo de la sociedad española. Esta ha sido una de ellas. De los múltiples ejemplos, me han impresionado dos. El del presidente de los empresarios, la CEOE, y el iluminado Iñaki Gabilondo. Algunos me amonestaréis por ver a Gabilondo, pero la realidad es poliédrica y hay que escuchar todos los enfoques.

El Sr. Gabilondo es un periodista con un sesgo político definido, que no cree en la libertad de mercado. Muy propio de la cultura empresarial de PRISA, (su difunto presidente dijo la famosa frase de “no hay coj.... para no darme un canal”. Así como de los múltiples ejemplos de su quehacer con la competencia y con aquel poder político que no se aviene a sus intereses). Cada uno es muy libre de expresar sus opiniones y en caso de no gustarte la línea editorial de una medio no atenderlo. Pero creo que estos momentos exigen una responsabilidad acorde a la gravedad de la situación. Una cadena líder de radio, una televisión con cierta audencia y un periódico líder de tirada; no pueden hacer una apología irracional de la intervención y culpabilizar de todo al mercado y a USA. Es un enfoque muy sesgado, doctrinario e inexacto. Esto tiene sus matices, opiniones,...., pero, insisto, análisis incompleto y parcial. Es muy triste que el grupo líder de comunicación esté propagando una postura totalmente interesada de un enfoque económico y social, demostrado obsoleto, ineficaz e injusto. Cuyo único resultado es la destrucción de bienestar y progreso como se ha demostrado. Gabilondo dedíquese a entrevistar a los Bardem y poco más. Por cierto,
lea esto, no le irá mal..

Más grave es lo de Díaz Ferrán. Es inaudito e inadmisible que el presidente de los empresarios sea liberal para los beneficios e intervencionista para las pérdidas. Señor, ser empresario es asumir riesgos y pagar los errores. La sociedad no puede financiar la incompetencia y avaricia de determinados especuladores, que se autodenominan empresarios. Esta crisis, aparte de otras muchas causas, viene de financiar proyectos basados en la revalorización de activos, especulación, no de una entrega de valor añadido. En el sistema económico todos son/somos necesarios, hasta los especuladores, pero cuando las cosas no les salen hay que dejarles desaparecer. Lea en Schumpeter el concepto de “destrucción creativa”. Y por lo menos, ya que se lo "han llevado" antes, maridados con los poderes políticos, mueran con dignidad. Para algunos es tiempo de morir. Necesitamos empresarios no especuladores de recalificación y subvención.