martes, marzo 28, 2006

LECCIONES DE LA HISTORIA.

Peter Drucker, el verdadero inventor de la gestión de empresas moderna, decía que cuando tenía que consultar sobre gestión acudía a la Biblia y a Shakespeare (léase Cervantes para nosotros). En sus libros, sus referencias sobre ética son Santo Tomás y Aristóteles, sobre liderazgo Jenofonte en su Anábasis. Y de igual manera con la mayoría de los puntos básicos sobre gestión. La gestión, al igual que todas las actividades humanes se guían por unas leyes básicas e inmutables. Es la aplicación e interpretación de estas leyes que rigen una ciencia lo que lleva a mejoras en la misma. Esto se entiende con un símil técnico, la gravedad, las leyes del electromagnetismo,....., están siempre ahí e inmutables, es su comprensión profunda y aplicación rigurosa lo que lleva a las mejoras de la ingeniería, y el consiguiente avance en el desarrollo de la humanidad.

El otro día tuve el placer de estar un rato con un cliente, que me explicó detalladamente su “visión estratégica” del futuro de su compañía. Esta disertación estuvo plagada de términos, como “reinforcement”, “team-agreement”, “sistemas de valor multinodales”,....Yo ya peino canas (orgulloso de ellas) y tengo una cierta formación y experiencia en esos temas. Me pareció que este cliente, si se me permite volver al símil técnico, proponía basar su estrategia en que las piedras volaban sin ningún elemento externo, o si se prefiere, que los Reyes Magos eran un "stakeholder" crítico en el éxito del proyecto. El almirante Horatio Nelson, una vez que oyó a dos oficiales discutir sobre maniobras de combate, les dijo: “Olvídense de las maniobras, vayan directos a por ellos”. Creo que mi buen cliente, debe hacer menos casos a aprendices de consultores y leer más historia, como hacía el bueno de Drucker.