MODELOS

Cuando Camilo, el segundo fundador de Roma, estaba sitiando la ciudad de los falerios, un traidor le entregó a un gran número de niños de la ciudad. El objetivo del traidor era que los romanos utilizaran los hijos de los defensores para obligar a los falerios a rendirse. Camilo al conocer este hecho, pronunció estas aladas palabras:

"Cosa dura es la guerra y que se mueve por medio de grandes injusticias y acciones violentas; sin embargo, también en el caso de las guerras hay determinadas leyes que obligan a los hombres nobles; así, no se debe buscar la victoria hasta el punto de no rechazar favores que son el fruto de acciones inicuas e impías - pues un gran general ha de basar sus campañas en la propia valía y no en la maldad ajena-".

Camilo devolvió los niños a la ciudad, junto con el traidor. A este general romano, se le nombró segundo fundador de Roma, pues fue quien venció a los galos que arrasaron la Urbe, al mando de Breno (el de "Vae Victis").

Estos modelos de noble comportamiento, eran los adoptados del pueblo romano. Fundamentalmente por su clase dirigente. Es un ejercicio muy interesante ver qué modelos de comportamiento se valoran como buenos en una sociedad, nación. Los mismos, nos indican el grado de virtud de ésta, o su envilecimiento.

Sería largo de tratar, pero en la nación española nos movemos entre el quijotismo y la picaresca. No hay, generalmente, un término medio de comportamiento, y la picaresca, ha ganado, claramente, la partida al quijotismo. Actualmente encumbramos más al pícaro oportunista que al trabajador esforzado, austero y con vistas al largo plazo; posponiendo la recompensa inmediata a un sólido crecimiento de su proyecto (sea éste económico, político, social,....). No tenemos abundantes "camilos", tenemos muchos "lazarillos y buscones".

El problema, vuelvo a destacar, son los modelos que estimamos como buenos. Como muestra, la maravillosa asignatura, educaciónparalaciudadanía, pone a los empresarios como explotadores. No hay comentarios a esta mayúscula necedad. Este es el problema, y es muy serio, lo del informe Pisa, es el principio.