sábado, septiembre 17, 2011

RECOMPENSAS Y CASTIGOS.

El mejor autor sobre liderazgo es Jenofonte, según P. Drucker, y no es baladí esa opinión del maestro austriaco. Dos de sus obras más importantes en este campo son la Ciropedia y la más famosa la Anábasis. En la Ciropedia, que es muy interesante, el ateniense indica que la clave de Ciro era el manejo de las recompensas, el botín, con sus sátapras.

Napoleón, en sus memorias, se quejaba de la avidez y ambición de sus mariscales, la base de su poder. Siempre debía estar en Guerra y seguir los dictados de Jenofonte, las recompensas. No pudo poner fin a esa dinámica, y en último análisis, él era un soldado.

Otro caso más sugerente es el del dictador romano Lucio Cornelio Sila, llamado zorro y león por sus enemigo Carbón, y modelo de Maquiavelo. El Cornelio era más sagaz que el Sire, no tan brillante, enérgico, elevado, semidios y honesto como el Gran Corso, pero más “fino”.

Pompeyo, le “exigió” una serie de prebendas. Sila le estaba muy agradecido, el Cornelio no olvidaba, y valoró que no debía ponerse en Guerra con la zona del Piceno, donde Pompeyo gobernaba absolutamente. Le dio recompensa, le humilló y le dejó cometer errores que le serían fatales frente a César. Pero Ofela, uno de sus lugartenientes más fieles, le exigió el consulado. Se lo negó y le ejecutó en público mientras hablaba en el Foro. Le atravesó un centurión. Recompensar y castigar, una decisión de semidioses.

domingo, septiembre 11, 2011

SANA ENVIDIA

jueves, septiembre 08, 2011

MISA POR EL ALMIRANTE LEZO.

Por desgracia no en su patria, si no donde se hizo inmortal.

A sus manes victoriosos.

sábado, septiembre 03, 2011

NO HAY MALOS SOLDADOS. II

Pufff.
Me hago viejo y "he dejado al mejor jugador sin carta". Filipo de Macedonia, el creador de la falange macedonia y el ataque de la caballería. Sin él y su legado, Alejandro no hubiera ido lejos.
Filipo se extrañaba de la cantidad de generales de otros ejércitos, él dijo que en toda una vida de Guerra, solo había logrado hacer un buen general, Parmenión. Héroe de las batallas de su hijo.

NO HAY MALOS SOLDADOS.

“No hay malos soldados, hay malos oficiales”. Es una de las frases de Napoleón, que ha pasado a la Historia, está preñada del genio napoleónico, y no es tautología.

La Batalla es el examen, pero los ejércitos se hacen antes. La misión del general no es solamente plantear bien el combate, eso es el final, el examen, si no construir un ejército que venza en cualquier condición. “No hay plan que resista el contacto con el enemigo” (Clausewitz).

Buenos militares han habido muchos. Constructores de ejércitos, generales en su grado sumo, pocos. El Sire, Aníbal el púnico, Mario, Sila, César, Nelson y el Gran Capitán….Y creo que no me dejo ninguno. Los modernos lo tuvieron fácil, no llegan al grado de generales excelsos como los anteriores.