SARGENTO MAYOR QUINCANNON

I Love this man.

GILIPO (ERA UN NOMBRE)

Atenas, durante la Guerra del Peloponeso, decidió enviar una gran flota de guerra con el objeto de someter a Siracusa. Ciudad de Sicilia cercana al bando espartano, de hecho era una ciudad fundada por dorios. La flota ateniense iba comandada por Nicias.

Siracusa pidió ayuda a Esparta y la ciudad lacedemonia, que no quería inmiscuirse abiertamente en el conflicto, envió como respuesta a un general, Gilipo, de sugerente nombre, para guiar al ejército de Siracusa. Gilipo más decidido y capaz que Nicias le acabó derrotando. El espartano era un general. Valiente, belicoso y conocedor del oficio de las armas. Nicias, más político que soldado, era precavido y dubitativo. Citando a Napoleón: “velocidad, decisión. Sed bienvenidas.”

Aparte del sugerente nombre de Gilipo, sobre todo en castellano actual, del sitio de Siracusa y derrota de Atenas, lo que más me llama la atención, es que los de Siracusa perdonaron la vida a los atenienses que sabían recitar versos de Eurípides. Nunca la pluma embotó la espada.

TERRITORIO ENEMIGO.

La semana pasada estuvimos en una feria que organizaba una grupo de clientes. Territorio enemigo, donde hay que extremar el cuidado. Como era en Galicia, Vigo, el influjo galaico produjo actividad parasubnormal intensa.

Uno de los parasubnormales más activos, vino a vernos y nos dijo que teníamos que ser más agresivos. Yo le miré, sonreí y asentí, él insistió en que era el momento de ser agresivos. Seguí sonriendo y asintiendo, me despedí con cortesía y me fui a otros menesteres. Mis compañeros, posteriormente, cuando se fue el cliente, me miraron todos y me dijeron que el cliente estaba sugiriéndonos que hiciéramos más descuentos.

Yo les dije que no, que lo que sugería este señor era venta agresiva con técnicas innovadoras. Por lo que les indiqué que al próximo cliente que viniera a nuestro “stand” le dijeran, que si no compraba mucho, le arrancaríamos el corazón y se lo echaríamos a los perros, mataríamos a su familia y desenterraríamos a sus muertos para volverlos a matar. Así lo hicimos.

Vendimos 5 euros y tenemos 11 denuncias en comisaría. Algo ha fallado en las técnicas de venta agresiva. Tendremos que llamar a un consultor y a un abogado penalista.

PUESTA EN ESCENA

Napoleón era un lector incansable, su curiosidad le llevaba a interesarse por todos los ámbitos del conocimiento: ciencia, religión, historia, poesía,.....Pero su pasión era la Historia, y a cierta distancia el teatro.

De la Historia, estudiaba todo aquello que pudiera aplicar a su “destino”. El teatro le gustaba mucho, siempre que podía, asistía a representaciones de su interés. Se permitía dar consejos al mejor actor de la época, Talma, sobre como interpretar a un rey. “Que no se os note esfuerzo para ser obedecido”, le decía.

Sus puestas en escena eran magníficas. Era un excelente actor. Una vez, antes de ver al embajador inglés, le dijo al chambelán, “indicadle que espere un minuto, necesito enfadarme”. Previo de la batalla, igualmente, escenificaba. “Desde estas pirámides, cuarenta siglos os contemplan.”.

Como admirador del mundo romano que era. Siempre trató de imitar a los hombres de esa época. Estudió todas las campañas de Aníbal al máximo detalle. Sabía que el púnico, antes de una batalla recorría con su estado mayor el escenario previsto, y aprovechaba para dar ánimo a sus hombres.; Trasimeno y Cannas. Él, antes de Austerlitz, recorrió la meseta de Pratzen con sus generales, y estuvo hablando con las tropas, previamente había sugerido a su entorno cercano que, como Aníbal en Cannas, derrotaría a un ejército superior en número. Buena puesta en escena.

ALGO LETAL

Esta mañana, muy temprano, mientras arrastraba mi avejentada humanidad por las orillas del Ebro. Un peregrino, para mí perfectamente identificable como japonés, me pidió, exigió, que le indicara el Camino de Santiago. Todo se desarrolló en “perfecto inglés”.

Yo adoro y admiro Japón, y los japoneses. Cuando terminé de explicarle su camino. Le hice una reverencia de respeto y cortesía, dándole los buenos días y el adiós en japonés. Las dos palabras que conozco.

Él, me miró un instante, con mirada fiera. Me hizo una reverencia perfecta y me dió las gracias, muchas gracias, en un japonés más perfecto que el mío. Su voz, fue una voz de antaño. No la he visto en ninguna película de Kurosawa. El japonés, era, es, menudo y fibroso, llenaba el espacio. Su voz y reverencia fueron perfectas.

En ese momento, y durante un segundo me atravesó algo letal, tuve un terrible escalofrío. El espíritu de Miyamoto Musashi, había venido a orillas del Ebro. Llamado por este hombre. El alma del samurai estaba allí. El aura del peregrino era un tigre.

POLTERGEIST

Cuando llegué por primera vez a mi actual empresa, hace ya más de cinco años y varios meses, pude observar que estaba situada al lado del cementerio del pueblo. Un pueblo a 10 Km. de una bonita ciudad, a orillas del padre Ebro.

Esto era claramente una señal de posible actividad paranormal, como pudisteis ver en la primera película de “Poltergeist”.

Después de dos años y medio de intenso contacto con los sindicatos de la empresa y sus centrales, debido a la crisis. He podido constatar lo cierto de mis primeras sospechas, pero la actividad en vez de paranormal, es parasubnormal. Una altísima actividad parasubnormal.

Trataré de localizar a la “pequeñita” de “Poltergeist” (la que salvaba a Caroline: Caroline corre hacia la luz) para que analice posibles soluciones. De otro modo la intensísima actividad parasubnormal acabará con toda la vida.